Sistemas de extracción para la industria metalúrgica
Durante el procesamiento de metales, se liberan partículas perjudiciales que se dispersan en el aire. Estas representan un riesgo para la salud de los trabajadores, afectan a la calidad del producto y pueden dañar la maquinaria. ¿La solución? Sistemas de extracción que capturan los contaminantes justo en el punto de origen y garantizan una buena calidad del aire. En Iberclean diseñamos soluciones personalizadas que se adaptan perfectamente a tu entorno de trabajo y procesos — para un aire limpio, espacios seguros y una producción eficiente.
¿Qué son los sistemas de extracción en la industria del metal?
Los sistemas de extracción en la industria metalúrgica eliminan del aire sustancias nocivas como polvo metálico, virutas o humos de soldadura. Se utilizan en todas las zonas donde se trabaja el metal: puestos de soldadura, máquinas CNC, estaciones de lijado o pulido. Un sistema de extracción suele estar compuesto por campanas captadoras, redes de conductos, filtros, ventiladores y sistemas de control. Son estructuras robustas, a menudo equipadas con dispositivos anti-chispas y, según el tipo de material, pueden estar certificados para atmósferas explosivas (ATEX). Así se mantiene el entorno limpio y seguro.
¿Por qué son esenciales estos sistemas en el trabajo con metales?
Los sistemas de extracción protegen tanto a las personas como al entorno laboral. Al limitar la exposición al polvo metálico y a los humos de soldadura, ayudan a cumplir la legislación en materia de seguridad laboral y evitan la acumulación de sustancias peligrosas. Además, mejoran la calidad del producto al reducir los contaminantes durante la producción y protegen las máquinas frente al desgaste por polvo, alargando su vida útil y reduciendo los costes de mantenimiento.
También disminuyen el riesgo de incendio al capturar directamente polvo metálico inflamable, contribuyen a la protección del medio ambiente al filtrar emisiones nocivas y permiten recuperar partículas metálicas valiosas. En resumen: son imprescindibles en cualquier entorno moderno de trabajo con metales.
Ventajas de los sistemas de extracción en la industria metalúrgica
- Salud: reducen la exposición al polvo, humos de soldadura y sustancias tóxicas
- Cumplimiento legal: ayudan a cumplir con normativas sobre calidad del aire
- Calidad del producto: disminuyen contaminaciones, aumentan la precisión
- Protección de maquinaria: evitan acumulaciones, alargan la vida útil, reducen mantenimientos
- Seguridad frente a incendios: capturan polvo inflamable
- Eficiencia: mejoran la visibilidad y aumentan la productividad
- Medio ambiente: reducen emisiones nocivas
- Recuperación de materiales: permiten reciclar partículas metálicas
¿Qué es el polvo metálico y qué riesgos implica?
El polvo metálico está formado por partículas extremadamente finas —a menudo micro o nanopartículas— generadas al procesar metales como hierro, aluminio, cromo o níquel. Estas partículas suponen un riesgo considerable para la salud. La exposición prolongada puede provocar neumoconiosis, asma o alergias, y algunos metales incluso aumentan el riesgo de cáncer. Además, irritan la piel y los ojos, y pueden afectar a órganos internos tras un contacto prolongado.
Por si fuera poco, el polvo metálico es inflamable y potencialmente explosivo —un riesgo serio en cualquier entorno industrial. También perjudica al medio ambiente, contaminando suelos y aguas. Por todo ello, una extracción eficaz es esencial: protege a las personas, las máquinas y el entorno.
Tipos de sistemas de extracción para la industria metalúrgica
Según la aplicación, existen diversas soluciones:
- Sistemas móviles: flexibles y adecuados para puestos variables —ideales para tareas de lijado o taladrado
- Sistemas fijos: diseñados para grandes instalaciones con extracción constante y potente
- Aspiradores industriales y mangueras de succión: para una captación localizada directamente en el punto de emisión
Nuestras soluciones de extracción para el trabajo con metales
En Iberclean sabemos que un sistema de extracción bien elegido marca la diferencia. Por eso ofrecemos soluciones modulares adaptadas a los requisitos de cada proceso. Desde sistemas sencillos de aspiración de polvo hasta instalaciones avanzadas con certificación ATEX, diseñamos soluciones personalizadas. Nuestros sistemas pueden combinarse con distintas unidades de filtrado y evacuación de residuos, e incluyen manómetros integrados para un control inteligente. Alta calidad, producción sostenible y desarrollo propio en los Países Bajos.
¿Qué capacidad debe tener un sistema de extracción?
Depende del tipo de trabajo:
- Soldadura: entre 700 y 1.000 m³/h por puesto
- Lijado: entre 1.000 y 2.000 m³/h
- CNC: entre 500 y 5.000 m³/h
Cuanto más finas sean las partículas, mayor velocidad de aire se requiere. Para partículas pesadas, es necesario mayor poder de succión. Cuantos más puntos de captación o mayor sea el espacio, más capacidad se necesita.
Extracción de polvo metálico durante el lijado
El lijado es una de las principales fuentes de polvo metálico. Los sistemas modernos capturan estas partículas en el punto de emisión mediante brazos articulados o campanas. Separadores ciclónicos y sistemas de filtrado garantizan una filtración eficaz. En este tipo de procesos, se requieren entre 1.000 y 2.000 m³/h por puesto, y los mejores sistemas logran capturar hasta el 99 % del polvo generado.
Sistemas de extracción Iberclean
Los sistemas de extracción Iberclean están diseñados para ofrecer máxima fiabilidad y eficiencia. Con más de 100 años de experiencia, combinamos conocimiento técnico con soluciones flexibles. El resultado: entornos de trabajo limpios, seguros y saludables —día tras día. ¿Interesado? Contacta con nosotros y recibe asesoramiento personalizado.