¿Qué es una zona ATEX y cómo elegir el equipo adecuado para trabajar con seguridad?
¿Qué son las directivas ATEX?
Desde julio de 2003, todas las empresas que operan en entornos con riesgo de explosión están obligadas a cumplir las directivas europeas ATEX, diseñadas para proteger a los trabajadores ante atmósferas potencialmente explosivas.
Existen dos directivas complementarias:
- ATEX 95 (Directiva 94/9/CE): regula los equipos y sistemas de protección destinados a ser usados en zonas con riesgo de explosión.
- ATEX 137 (Directiva 1999/92/CE): define los requisitos mínimos para proteger la salud y seguridad de los trabajadores expuestos a atmósferas explosivas.
Estas normativas afectan a cualquier equipo, mecánico o eléctrico, que pueda generar una fuente de ignición. Aplican en sectores como química, petroquímica, tratamiento de polvo, alimentación o minería.
Clasificación de zonas ATEX
Las áreas con riesgo de explosión deben clasificarse según la frecuencia y duración de la presencia de una atmósfera explosiva. Se dividen en:
Gases, vapores o nieblas:
- Zona 0: presencia continua o prolongada
- Zona 1: presencia probable en condiciones normales
- Zona 2: presencia ocasional y de corta duración
Polvo:
- Zona 20: presencia continua o prolongada
- Zona 21: presencia probable en condiciones normales
- Zona 22: presencia ocasional y breve
¿Cómo debe estar certificado un equipo ATEX?
Cada equipo debe clasificarse según:
Grupo de aplicación:
- II → Industria general
- IM → Minería
Categoría de protección:
- 1 → Muy alta (zonas 0/20)
- 2 → Alta (zonas 1/21)
- 3 → Protección normal (zonas 2/22)
Tipo de atmósfera:
- G → Gases, vapores o niebla
- D → Polvo
Además, debe incorporar el marcado CE y el símbolo “Ex”, y contar con un expediente técnico disponible durante al menos 10 años. Para equipos de categoría 3 y algunos de categoría 2 no eléctricos, el fabricante puede autocertificar, siempre que cumpla los requisitos técnicos y documentales.
¿Por qué es crítico cumplir con ATEX?
Porque una mala elección puede tener consecuencias graves. Los sistemas de aspiración, filtración o ventilación mal diseñados o sin certificación pueden convertirse en fuentes de ignición en atmósferas explosivas.
En Iberclean, todos los equipos destinados a zonas clasificadas están certificados según normativa ATEX y seleccionados en función del tipo de polvo o gas, zona y categoría exigida, para garantizar seguridad y cumplimiento legal.